un baúl lleno de pretensiones
una caja de música de teorías
un contrato que nació creyendose ley
una ceremonia que hicimos puerta de futuro
una frase al cuello como única verdad
una imaginación que nunca alcanzo
deseos difuminados por una realidad
normas que nunca cumplo
castigos que espero
esperanzas que me castigan
bocetos de sumisión
nominaciones que no nos conocen
un caracter que desafía a la lógica
un cuaderno de bitácora en la cabeza que tacho en cada tropezón
un cuadro de palabras que costó colgar
un cartel en la puerta que le nombra
un puñado de adjetivos disparados, cicatrizados en un silencio
sus manos que son mapa y palabra
un despiste que no se cura
un calendario mentiroso
idas y vueltas
bienvenidas y despedidas que ordenan desordenando anárquicas costumbres
una independencia rebelde con un no por bandera
una historia en la que busco atajos
una nostalgía de cosas por hacer
un yo caprichoso que nos gana
preocupaciones que aprendí a adivinar
lágrimas que ya no asustan
gestos que entierran malentendidos
planes que acabarán por llegar
una ambición a la que no renuncio
un arsenal de disciplina guardado en un cajón, ajuar de una casa
un temor al que no consigo encontrarle la seriedad
mil quejas que piden azotes
mil y una quejas que piden abrazos
un montón de amenazas a las que hago burla
un uniforme que hizo de la virtualidad realidad
su primera visita, cadena con la que me ató
un desierto de impaciencia, campo de siembra inacabable
tantos días por detrás, infinitos por delante
una imperfección que costará una vida corregir
incontables dudas que perdí
límites por derrumbar y tiempo de sobra
una razón que no deja de pedir
la niña que sacó de mi interior
una cámara de fotos que hizo imagen una fantasía
todo lo que trajo consigo y que no pienso devolverle
todo lo que me falta por contar...
¿Qué se entere quién? y eso digo yo ¿de qué?
No se que dices sitos.
Por lo demás una buena forma de informarle indirectamente, siempre desde ese decir y no decir que tienes tan claro
Y todo esto a las 8 de la mañana... madre mía, qué día más repelente tengo!!!